Nada. No
queda nada. Nada de este corazón, que ya está roto. Nada de ese imperio llamado
Roma, que ya se destruyó. Nada en ese vaso, que no hace mucho eras tu quien
decidía verlo medio vacío o medio lleno, pero ahora el problema es que ya no
hay nada. Nada de esas palabras. Esas palabras sin sentimiento alguno. Y en
medio de esa nada, yo. Y esto ya no lo soporto ni un segundo más. Es difícil y
a mi no me queda otra cosa que rendirme. ¿Qué puedo hacer si no? Nada. Sólo
sentarme en el suelo a esperar que esta mala racha pase. Estoy harta de decir
que estoy bien mientras una lágrima se desliza por mi mejilla. Cansada de sonreir,
de fingir ser feliz. Todo el mundo viene a explicarte sus putos problemas, ¿y
tu qué? A mi ya ni la almohada me escucha. Será un pozo sin salida, ¿quizá? O
a lo mejor es tan hondo que necesito ayuda para salir. Pero, ¿he tocado fondo?
Ni si quiera lo sé.
9.11.12
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Qué más da...
Nunca estamos listos para lo que la vida nos trae. Llevo unos días, no sé muy bien porqué, llorando como una niña pequeña… Siento que todo ...
-
Y que si me echas de menos, estoy a sólo una llamada de distancia. No me vengas con la tontería de que el orgullo, el orgullo... porque si d...
-
Decimos que no somos nada y lo somos todo. Decimos que no nos pasa nada y nos pasa de todo. Decimos que no queremos nada y lo queremos ...
-
Yo sigo en ese todo y nada que no me deja a penas dormir. Lo tengo todo, pero me siento vacía y no lo entiendo. Quizá el problema seré ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Regálame alguna de tus palabras. Merci.